Con camisa y collar de mayoral, Renedo es una de las personas con más carisma de nuestra sala. Él es el encargado de administrar la cajadel bingo, y su frenética actividad durante toda la jornada es fundamental para que la sesión de juego trascurra sin ningún problema.
Su particular despacho está detrás de uno de los bombos de la sala, y después de cada partida él es el encargado de ajustar las cuentas con los vendedores y preparar los premios que después recibirán los clientes.
Por sus manos pasan a diario muchos miles de euros, aunque el prácticamente ni se inmuta mientras cuenta billetes y monedas a velocidad de vértigo.
“Al final te acostumbras”, no explica en uno de esos escasos momentos de respiro que se toma para dejar que la mente descanse. “Es mucho dinero y siempre hay que estar muy concentrado para que no haya ningún error”.
Renedo cuenta con una silla tuneada, muchas veces guarda su cena en un cajón que actúa de improvisado microondas y utiliza un neceser con estampado para guardar dinero. Anécdotas y curiosidades de un tipo que te gana con su cercanía y su fuerte carácter.
“Todos los premios hacen que la gente se ponga contenta. En ese sentido, yo soy un afortunado, porque me encargo de repartir felicidad a la gente”.
“A mí me gusta mi trabajo. A veces tengo que poner firmes a algunos, pero ellos saben que les quiero”, reconoce mientras le sale una sonrisa irónica.
Así que ya sabes, si te toca un premio en nuestro bingo tienes todas las posibilidades de recibir billetes que han pasado por las manos de nuestro cajero. ¡Ojalá tengas suerte!